La existencia no tiene sentido y la prensa tampoco. Los desgraciados del periódico El Mundo no saben qué hacer para que vuelva a abrir sus páginas por la sección de Cultura, o para que me deleite con las columnas de opinión del señor Umberto Eco. Me da igual que Pedro J. se haya convertido en un sucio oportunista con tendencias ultraderechistas y delirios de grandeza porque... a partir de la semana que viene, los muy filibusteros ofrecen, a mitad de precio, las primeras cuatro temporadas de El Ala Oeste de la Casa Blanca. Maldición!!!
Nota: Me entero por la prensa que La Sexta, adalid de la independencia, retira de su parrilla nocturna Daiakuji: el mercenario del sexo, un manga erótico que veían más de 300.000 espectadores/as hambrientos/as. La razón es comprensible. Alguno de esos 300.000 televidentes se sobresaltó cuando una leve erección hizo acto de presencia al ver como un sujeto seducía a una colegiala. El Foro del Espectador, órgano sensible donde los haya, ha acusado a la cadena de instigar a la pedofilia. Emilio Aragón tiene la conciencia tranquila. Y, por si lo dudaban, les ha remitido al principio del capítulo en el que queda claro cristalino que la jovencísima Satsu ya ha cumplido los 18 y ha pasado por la vicaría. Si a su chico le gusta vestirla de colegiala es ya una pequeña perversión contenida en el marco de la legalidad. Es una pena que a La Sexta le haya dado ahora por ser una cadena de vocación "familiar", hasta de madrugada, y se haya decidido por el cese del anime...
Escrito por La pequeña Delirio a las 27 de Septiembre 2006 a las 11:24 AMEs la vieja trampa, esa que tan bien se sabe el Alan Moore y que se salta con un fosbury tan elegante. Pero el panópticon -- esa paradoja de ojo que no quiere ver -- no descansa; y, si no basta con prohibir la reproducción de crímenes reales, habrá que prohibir la imaginación, la sugerencia, la interpretación.
Escrito por anata a las 2 de Octubre 2006 a las 05:35 PM