La Pequeña Delirio

Mi Super Ex-Novia

Mi Super Ex-Novia es como la película de superhéroes que haría vuestra vecina bakala de 15 años, la del tatuaje de Justin Timberlake entre las tetas: no tiene ni puta gracia; en segundo lugar, es un coñazo, y en tercer lugar, véanse el primer y el segundo lugar. Es el film que hubiera escrito la susodicha tras caminar hasta su casa, borracha como una cuba a las dos de la mañana y encontrar, empalado en su tacón de 15 centímetros un cómic de un cachas moreno con capa que vuela y lanza rayos por los ojos. Llega a su casa, escribe el guión (a mano, con boli púrpura fashion y puntuando las íes con corazoncitos) y se lo pasa a Ivan Reitman, un director tan bueno como el material que le dan o, mejor aún, como el que acepta, que suele estar en el fondo del barril de los guiones.

Lo dice Rafa en Las Horas Perdidas y, dios mio, creo que tiene razón. Sigan leyendo que no tiene desperdicio. Hasta el crítico se harta de ponerla verde. Snif! Yo quería verla pero ahora, no sé, no sé... Solo pienso en hacerme un tatuaje entre los pexos!