La Guerra de las Galaxias entró en mi vida por primera vez a la tierna edad de siete, ocho o nueve años, en casa de mis primos. Se puede decir que soy hija de El Retorno del Jedi (que no "venganza") y que, junto a Regreso al Futuro y La Princesa Prometida, la santa trilogía ha marcado un antes y un después en esta personita; un punto de inflexión que vino a la vez que cumplía una década.
Suelo guardar enlaces en mi rincón lleno de favoritos y el que les ofrezco lo encontré en el blog de Otomano hace bastante tiempo. Como me ha hecho gracia acordarme hoy del señor Frank Cho por obra y gracia del duende que vive los fines de semana en mi teléfono, les traigo para esta madrugada de domingo un chiste y un enlace. El bikini de Leia no solo obsesionaba a Ross; muchas novias han sido esclavas de algún que otro Java...
Escrito por La pequeña Delirio a las 10 de Diciembre 2006 a las 11:50 PM